Hubo actividades previas, la lectura del documento y una movilización por las calles de Olavarría. Exigieron respuestas por los femicidios ocurridos en la ciudad en los últimos años.

Organizaciones sociales, políticas, feministas y autoconvocados se movilizaron este martes el centro de la ciudad para denunciar la violencia patriarcal, el ajuste y el desmantelamiento de políticas públicas de género. Reclamaron justicia por víctimas locales y repudiaron el accionar del gobierno nacional.

Todo, en el marco del décimo aniversario de la primera marcha de Ni Una Menos y Olavarría volvió a ser escenario de una importante movilización. Bajo la consigna “Marchamos contra la crueldad: no es libertad, es violencia patriarcal”, el documento leído durante el acto denunció el ajuste sobre las políticas de género, la persecución institucional y el vaciamiento de programas que acompañaban a víctimas de violencia.

En el texto leído por representantes de distintas organizaciones, se cuestionó con dureza al gobierno nacional, al que se acusó de ejercer violencia institucional mediante la eliminación de trece programas orientados a la prevención y erradicación de las violencias machistas. También se destacó la reducción de recursos para la Línea 144 y el vaciamiento de áreas clave como la Dirección de Géneros y Diversidad del Ministerio de Salud.

Durante la lectura del documento, se recordó que desde la primera marcha en 2015 hasta hoy se registraron 2.827 femicidios en Argentina, y se hizo énfasis en que “nos matan cada 30 horas”. Asimismo, se reclamó justicia por el femicidio de Sofía Vicente, ocurrido en Olavarría en marzo de 2023, y por otras víctimas de la violencia de género en la ciudad: Andrea Trinchero, Magalí Giangreco, María Luján Riva De Neira, Nieves Olguín y Mara Navarro. De hecho, hubo familiares de Sofía Vicente, entre otros allegados a las víctimas.

Además, se exigió la aparición de Tehuel de la Torre, se reclamó justicia por el triple lesbicidio de Barracas y se exigió la plena implementación de la Ley de Educación Sexual Integral, el acceso efectivo a la Interrupción Voluntaria del Embarazo y el restablecimiento de políticas como el Plan ENIA y el Plan Mil Días.

También hubo fuertes críticas al ajuste económico. Se rechazó la Ley Bases, la reforma laboral, el desfinanciamiento de comedores y la falta de alimentos para sectores vulnerables. “Estamos en emergencia alimentaria. Esta política de hambre es una política genocida”, sostuvieron.

En el cierre, el documento reafirmó la continuidad de la lucha colectiva frente al “odio y la crueldad del gobierno nacional” y expresó: “Como hace diez años, cada 3 de junio volvemos a decir con fuerza: Ni Una Menos. Vivas, libres y desendeudadas nos queremos”.

La columna de manifestantes recorrió las calles con sus tradicionales cánticos “Ni una menos, vivas nos queremos”, tuvieron una pasada por la Comisaría de la Mujer donde insistieron sus reclamos por los femicidios locales y volvieron al Paseo Jesús Mendía, lugar de la concentración.

fuente: cdenoticias.com

;