Previo a cualquier otro tema, es imprescindible celebrar la restitución de identidad al nieto 133. En cuanto a las elecciones, una sola certeza: nadie, absolutamente nadie, sabe qué ocurrirá el 13 de agosto. Nadie tiene una convicción completa, ni mucho menos, sobre a dónde irá a votar una sociedad embroncada que, a la par, no quiere saber nada con más sobresaltos.
Contenido original de pagina12.com.ar