Este jueves se concretaron las autopsias sobres los cuerpos de la mujer y su hijo. Fueron colocados en el freezer “24 o 48 horas” después de los asesinatos.
En el marco de la investigación de las tres muertes del barrio Carlos Pellegrini continúan las tareas para establecer lo sucedido. Una de las pericias de destacada importancia para ello se concretó este jueves por la tarde en Azul: las autopsias sobre los cuerpos de María Sandra Aguer y Thiago Contreras.
Cabe recordar que el martes 29 de agosto por la tarde, los cuerpos de la mujer de 53 años y de su hijo de 13 años fueron hallados dentro de un freezer en la vivienda que compartían con Fabián Ene en Santa Cruz y Lisandro de la Torre. El hombre fue hallado ahorcado.
Para los investigadores de la UFI Nº 10 local, a cargo de la fiscal subrogante Paula Serrano, la primera hipótesis del crimen estableció que los hechos se dieron en contexto de violencia familiar. Ene habría atacado a su pareja y al hijo de ella entre el martes 22 y el miércoles 23 de agosto, y se habría suicidado entre el lunes 28 y el martes 29 de agosto.
En función del avanzado congelamiento de los cuerpos, la pericia de autopsia debió esperar a que el proceso de descongelamiento finalizara para poder concretar la intervención. Por ello se postergó hasta la tarde del jueves y finalizó durante la noche.
En cuanto a los resultados, se pudo saber que madre e hijo presentaron el mismo mecanismo de muerte: golpes en la cabeza. Según detalló una fuente con acceso a la causa, se determinó que fallecieron por “destrucción de masa encéfalo craneana y politraumatismos sin signos de defensa”.
Además, se constató que en ambos cuerpos los golpes se encuentran mayoritariamente del lado izquierdo, por lo que para los investigadores “hace presumir que el agresor es diestro”.
En tanto, en base al estado de los cuerpos, se estableció que fueron congelados “24 o 48 horas” después del fallecimiento.
La autopsia del cuerpo de Ene se concretó el miércoles por la mañana y confirmó la hipótesis del suicidio que sostuvo la UFI Nº 10 desde el inicio del caso.
Cabe recordar que, en base a información que expuso el fiscal general de Azul, Marcelo Sobrino, Ene habría utilizada una maza para atacar a María Sandra y Thiago. La herramienta fue secuestrada para ser periciada y se analiza la calificación de “alevosía” en virtud de la forma en que se sospecha fueron cometidos los asesinatos, lo cual se confirmó mediante la autopsia al no haberse hallado signos de defensa por parte de las víctimas.
Asimismo, en la vivienda que compartían se halló una carta en la que el hombre admitió haber cometido los crímenes y también se secuestró cocaína.
Crimen en barrio Carlos Pellegrini: el presunto autor y suicida dejó una carta
