Señalaron que el fiscal Ignacio Calonje, a cargo de la causa, se basó en un “perito de parte” y no en el peritaje oficial para tomar esta determinación. El imputado era responsable de la Escuela de Policías. La apelación deberá resolverla el Fiscal General Marcelo Sobrino.
En el mediodía de este viernes, se dio a conocer que la Unidad Funcional de Instrucción especializada en Violencia Institucional y Delitos Carcelarios a cargo del doctor Ignacio Calonje desestimó una denuncia por abuso sexual donde quien fuera titular de la Escuela de Policía Juan Vucetich, Ivan Rodríguez, era el principal acusado.
El abogado de la víctima Jonatan Oliva y la agrupación Animate convocaron a una conferencia de prensa para confirmar que apelarán la decisión de Calonje ante Fiscalía General, que designe un fiscal especializado en violencia de género y, además, que el hecho llegue “a un juicio oral como corresponde” dada la “contundencia de la prueba”.
Cabe señalar que, tras la denuncia hace dos años, Rodríguez fue apartado de la Escuela y desvinculado de la Policía de la Provincia.
Una cadete denunció un grave caso de abuso sexual en la escuela “Juan Vucetich”
Oliva fue el primer orador de la conferencia y explicó que la intención fue “darle visibilidad a una causa que ha tenido cierta trascendencia ya desde hace unos años”.
“La idea es tratar de obtener una respuesta por parte del Fiscal Departamental de Cámara respecto de una situación que nos preocupa a los abogados representantes del derecho penal, pero también a instituciones como la de Liliana Cuenca, presidenta del Grupo Animate” añadió.
Catalogó la decisión de una decisión de “gravedad institucional” y admitió que “es la primera vez que me sucede que un Fiscal desestima una denuncia con tantos elementos de cargo, con prueba sumamente contundente, en una instancia en la que por los menos se debería haber elevado a juicio respetando tratados de derecho internacional como la Convención de Belém do Pará, leyes de índole nacional con jerarquía constitucional y también leyes que protegen todo tipo de violencia contra la mujer”.
El caso, de abuso sexual agravado en el marco de una institución como la Escuela Vucetich “es un tema sumamente grave y delicado. En mi experiencia como abogado, les repito, es la primera vez que me pasa en una causa en la que un fiscal desestima una denuncia teniendo prueba de cargo como, por ejemplo, pericia oficial a la víctima, pericia oficial al imputado de abuso, donde consta no sólo la verosimilitud de los dichos de la víctima, sino indicios claramente suficientes para considerar que el imputado muestra signos de una persona compatible con los indicadores de un abuso sexual”.
Además, mencionó, “hay testigos, siempre en esta clase de delitos, que son testigos oblicuos, testigos de oídas, pero que dan plena fe de la angustia, el sufrimiento, el dolor que ha venido sintiendo la víctima. Y ante esa situación el señor agente fiscal, el doctor Calonje, sorprendentemente toma un dictamen que nadie lo esperaba, que es el desistimiento de la denuncia”.
Según Oliva, el archivo de desistimiento de una denuncia implica “que no va a seguir con la investigación, pese a la prueba abundante del plexo probatorio que indicaría, por lo menos, darle la posibilidad a la víctima de tener un juicio oportuno, como lo establece en los tratados de derecho internacional”.
El principal punto está, según el letrado, en las pericias: “una pericia de parte, bien lo sabemos, implica pagarle a un perito para que le abra un informe. Obviamente que en la mayoría de los casos hay grandes diferencias entre la pericia de parte y la pericia oficial. Siempre guardando los intereses la pericia de parte en relación a los intereses del imputado, justamente. Bueno, este caso no es la excepción. Ahora, lo que sí es excepcional es que el señor agente fiscal, en este caso el doctor Calonje, valorice por encima de la pericia oficial, que es claramente contundente, a las pericias de parte”.
De esta forma, se le “negó la posibilidad a la víctima de tener un juicio oportuno. Acá no estamos hablando de absolución o condena. Acá eso ya depende de jueces. Acá estamos hablando de darle la posibilidad ante un hecho gravísimo desde el punto de vista institucional, pero sobre todo desde el punto de vista, con perspectiva de género, en este caso de una mujer que aspiraba a ser cadete en la escuela Vucetich, donde fue entre cuatro paredes, en un sector obviamente que llamaban privado, de este señor, el imputado Iván Rodríguez”.
“Por lo menos lo que nosotros estamos acá pidiendo es un juicio oportuno. Que esta causa se eleva a juicios como en la gran mayoría de los casos, incluso con menos pruebas de cargo. Acá hay pruebas de sobra. Nos sorprende la decisión del señor agente fiscal porque avasalla contra tratados de derecho internacional, no sólo contra la salud psicofísica de mi clienta sino justamente con tratados de derecho internacional colocando a no sólo el Ministerio Público Fiscal, sino al Poder Judicial en su generalidad, en un conflicto institucional. Nada más y nada menos. Por eso es tan grave la situación”.
Liliana Cuenca, referente de Animate, señaló y pidió “repudiar” al fiscal Calonje “que supuestamente que si es un fiscal, le tiene que dar a la víctima tranquilidad, acompañarla. En este caso, está haciendo todo lo contrario. ¿Qué víctima puede llegar a tener alguna esperanza de que le toque este fiscal? Y bueno, también pedirle al fiscal Marcelo Sobrino que por favor revea la causa”.
Señaló la contundencia de la prueba dado que “este señor tenía a cargo a la víctima. En oportunidades sacó el número de teléfono de una planilla para poder acceder y acercarse a la víctima. De ese modo se empezó a tener contacto con ella, en la cual sucedieron los abusos sexuales dentro de una habitación donde era privado. O sea, cuando hay un abuso sexual no hay gente, siempre es privado, es entre el denunciado y la víctima. Y acá Rodríguez Iván rompió con todo. Él no puede pedirle a una cadete un número de teléfono, no puede preguntarle por su vida privada como lo ha hecho con la víctima. Hay claramente, digamos, una asimetría de poder”.
Lo que pidió, con ello, es que “este tipo de delitos se investiguen con perspectiva de género, cosa que no se ve en este caso. Me resulta sorprendente que hay prueba tan elemental que refuerza los dichos de la víctima. Los mensajes de textos que el imputado tenía con la víctima, cosa que estaba vedado y prohibido en el marco de la Escuela Vucetich. Hay un testimonio del comisario inspector de la Escuela, donde precisamente interpreta al imputado diciéndole que no tendría que haber tenido ningún tipo de conversación de forma privada con ninguna cadeta. En este caso, estamos hablando de la víctima”.
“Acá no venimos a dar un veredicto, pero por lo menos lo que estamos solicitando es que esto se lleve a juicio, que se diriman todas estas pruebas en un juicio como corresponde, cumplimentando con lo que establece en el Tratado de Derecho Internacional, tan sencillo como eso” agregó Cuenca, con contundencia.
Ante la consulta periodística, confirmó que “no hay un plazo predeterminado” para la resolución de la apelación, pero “esperemos que esto se resuelva pronto, porque está muy clara la cuestión”.
“La causa tuvo un buen trabajo”
El doctor Oliva señaló que tras haber sido denunciado el hecho, la causa comenzó a ser investigada en la Ayudantía Fiscal de Derecho contra la Integridad Sexual, a cargo del doctor Iturralde, “que por lo que yo estuve mirando en la causa, hicieron un muy buen trabajo con un allanamiento al imputado, inmediatamente se lo apartó del cargo, se estaba trabajando muy bien”.
Por la cuestión de fuerza pública, se decidió llevar a la competencia de delitos carcelarios, a cargo del doctor Calonje, “y la realidad es que no sucedió dentro de una unidad penitenciaria. A mí me resulta un poco curioso que esté a cargo el doctor Calonje por varias razones, pero sobre todo porque, evidentemente, el fiscal a cargo de esta causa, ahora a cargo, le falta perspectiva de género”.
Finalmente, los presentes acusaron directamente al doctor Calonje de que falle al “principio de objetividad y no tanto en relación a la función pública y bien lo remarcaron acá de asimetría entre el imputado y la víctima en el marco de la escuela Vucetich, sino por una cierta enemistad manifiesta con el padre de la víctima. Eso creo que ha influenciado en el veredicto, mejor dicho, en el dictamen del fiscal”.
“Justamente el fiscal lo investiga al padre de la víctima por otra clase de delito y hay planteos justamente de recusar al fiscal y creo que tiene que ver esa rajadura que se tiene en el principio de objetividad, tiene que ver más con la enemistad que tiene con el padre de la víctima. Puede ser también, no me consta, pero puede ser que haya intereses extrapolados respecto de funcionarios que tienen cierta jerarquía y cierta trayectoria en el marco de las denuncias. Puede ser, pero no me consta” cerraron.
Fuente: cdnoticias.com
