El titular de Supermercado El Imparcial, Mario Lurbet, señaló que las compras fueron similares a 2023 y que las compras de último momento “salvaron” el periodo de Navidad. Puso el alivio de la estabilidad con baja inflación como principal valor en el rubro.
Tras la celebración de la Navidad, una de las fiestas con mayor consumo, el titular de supermercado El Imparcial, Mario Lurbet, realizó un análisis de las ventas que tuvo en su comercio y que se asemejan bastante al informe emitido por CAME horas atrás: hubo una pequeña suba del 1% del consumo durante la primera de las Fiestas.
Lo hizo en diálogo con el programa radial “Levantate” que se emite por FM Sapiens 102.7. Señaló que se trató de un año “bastante atípico” y que la llegada del gobierno de Milei generó un “cambio de paradigma”: “la gente compra lo justo y necesario, siempre en líneas generales. Y eso también ha llevado a que los productos y artículos de navidad también estuvieran enmarcados dentro de lo que fuese la canasta general. Dentro de todo en El Imparcial propiamente dicho nos fue muy bien gracias a Dios. Veníamos con una preparación ya de hace tres meses con los preparativos navideños y de hecho que muchos esperan a último momento por muchas cuestiones”.
Realizó una comparativa con décadas pasadas donde el anfitrión se encargaba de las compras y del costo de esas compras o “dos o tres personas”. Hoy “con los números como se han ido es imposible que de un solo bolsillo puedan salir los gastos generales para Navidad” y habló de compras más chicas de más personas que “aportan” a la cena navideña.
En este punto y en la comparativa con el cierre de 2023, dijo que “anduvimos más o menos igual. Mucho más, algo muy marcado, no. Cerramos bien. La expectativa estaba, estábamos preparados. En un momento faltando dos o tres días, creí que iba a quedar un stock bastante importante de todos los artículos que lleva la canasta, pero no, los últimos tres días estuvimos al 100 por la venta y llegamos muy bien” señaló dando cuenta del valor de las compras de último momento.
También habló de cambios de consumo de los mismos productos navideño: dijo que hubo baja de consumo en garrapiñadas, confites y turrones. “Lo tenés que tener porque es una cuenta dentro de los artículos que están dentro de la mesa navideña pero se vende cada vez menos, es algo que se nota desde hace cinco años o seis por lo menos” dijo Lurbet.
“Antes traías un surtido inmenso de confituras y de artículos para navidad y año nuevo que hoy en día estás focalizado y enfocado en esos ocho, diez, doce artículos que no sobrepasa más de ahí. El Mantecol, garrapiñada, el confite con chocolate, un confite de maní color, tres variedades de turrones. Se terminó el higo turco, se terminó las nueces que vos rompías, las almendras, las avellanas, las castañas de cajú. Se terminó el panetone, se terminó eso ya pasó a otro plano”.
Con respecto al consumo de bebidas, el titular de El Imparcial indicó que “hay una tendencia al consumo de consumir poco y mejor calidad. Eso es lo que vengo viendo hace un buen tiempo. Hay un abanico y un ofrecimiento importante vinos, en champagne, en sidras por ejemplo tenés toda la variedad, en vidrio tanto de 710cm3, 920cm3, tenés las tres, cuatro, cinco marcas de primera línea que no diferencia mucho con el precio con las segundas marcas”.
Admitió, a continuación, que la tendencia de ventas en Año Nuevo será más bajo, como históricamente sucede en este tipo de fiestas: “en Año Nuevo hay un cambio porque para mucha gente la Navidad tiene otra connotación, un sentido específico en cuanto a la parte familiar, estar juntos. Ya Año Nuevo te relajás, es distinto, viajás, y el que se queda se arregla, ya pasó navidad con un familiar, pasa con otro o no algunos casos contados los que retoman o vuelven a repetir la juntada”.
La perspectiva del año próximo
Finalmente Lurbet valoró la estabilidad de la inflación, algo que lo muestra con expectativas para el año próximo: “he venido analizando que el comercio ha mejorado ¿Por qué te lo digo? Veníamos con una inflación tremenda, llegó al 25% mensual, era algo que era insostenible, realmente nos chocábamos, no sé cuánto tiempo más iba a poder aguantar con el negocio a pesar de que uno tiene muchos años”.
“Las empresas hoy en día puedan sostener en el tiempo dos meses, tres el mismo precio, eso es muy bueno. Te permite no salir alocadamente ni a comprar dólares ni a comprar mercadería. Podés comercializar de otra manera y lo mismo le pasa a la gente. Quizás se puede proyectar en hacer otras cosas. Hacer un arreglo en la casa, pintar, alguna reparación. Porque vos ves que por lo menos no se tiene el sueldo con la inflación comiéndolo” cerró el comerciante.
Fuente: cdnoticias.com
