La decana de la Facultad de Ingeniería, María Peralta, explicó y desmintió las acusaciones del gobierno nacional que los docentes cobran millones de pesos. Los ingresantes docentes y no docentes “están por debajo de la canasta básica”.
En el marco de la convocatoria a la importante movilización en defensa de la universidad pública y en contra del veto del presidente Milei a la Ley de Presupuesto Universitario, la decana de la Facultad de Ingeniería María Peralta hizo mención a las acusaciones del gobierno nacional sobre presuntos docentes que cobran “millones de pesos” además de señalar que hay estudiantes matriculados “que no existen”.
Peralta explicó que “tenemos en el caso de docentes diversas jerarquías y depende también mucho de la antigüedad”. Dejó en claro que “quienes ingresan, en la categoría inicial docente, están con salarios que no llegan a la mitad de la canasta básica. Tanto el docente como el no docente. El no docente en las tres primeras categorías están también por debajo de la canasta básica”.
Señaló que el gobierno nacional busca desinformar tomando casos como por ejemplo “el titular de máxima antigüedad que se está por jubilar, y es probable que el salario sea importante, pero no es lo mismo que el ayudante que ingresa” aclaró.
Tras mencionar que “estamos cumpliendo 50 años como universidad y 55 como Facultad (de Ingeniería), eso hace que estemos con un recambio generacional. Es un momento que se nos jubilan los docentes de mayor jerarquía e ingresan los docentes con la menor jerarquía, sin antigüedad, y ahí es donde tenemos el problema”.
Insistió en que “hay muchos cargos que están quedando vacantes porque no son atractivos. Una dedicación exclusiva, 40 horas semanales de actividad que cobran 600 mil pesos o alrededor de esa suma no es atractivo”. Dijo que como problema grave “nos vamos a quedar sin gente en este escenario. Ya está pasando”.
Con respecto a lo que se dijo de matriculados en la universidad pública que no sería real, Peralta admitió que “no sé en qué se basan” dado que “tenemos un sistema de información universitaria que es accesible a quien quiera acceder. Más que nada el gobierno tiene acceso a las estadísticas, a ese sistema donde están todos los estudiantes, los graduados, lo presupuestario, todo lo que forma parte de la universidad”.
En este punto reflexionó y dijo que el problema “es más amplio” porque “si hablamos de la educación en general y la transición entre el nivel medio y la universidad en primer año hay una tasa de desaprobación alta, de deserción importante, entonces los estudiantes que ingresan a las carreras es probable que en primer año cambien de carrera, de universidad o dejan de estudiar”.
“Hay un número que hay que ver, que hay que trabajar para bajar y que hemos logrado bajar. De un 50% que hace algunos años teníamos hoy es 38%”. Justamente, para mejorar esa tasa buscan “tener el servicio de calidad que reclamamos para tener a disposición de los estudiantes todo lo que hay que tener para que ese tránsito tenga cada vez menos deserción” cerró.
fuente: cdenoticias.com